También entre los muertos hay clases

García Hortelano es uno de los novelistas muertos amparados por el sistema. Hoy –26 de julio de 1997– viene en La Esfera / El Mundo un comentario de Santos Sanz Villanueva a los Cuentos completos de Hortelano y, en el título, lo llama “novelista capital del medio siglo” y “gran narrador”. García Hortelano fue sin duda un buen tipo, una excelente persona, que se hizo querer por sus amigos. Pero como novelista era bastante mediocre. Todo cuanto urde Sanz Villanueva en su poco riguroso artículo es una sarta de mentiras para seguir navegando a favor del viento que más empuja, el sol que más calienta y la corriente que lleva a más seguro puerto.

    Otro cadáver privilegiado es el de Juan Benet. Jamás se habla de excelentes escritores –todos mejores que García Hortelano– , como José María Requena, Antonio Risco, José Luís Acquaroni, Alfonso Grosso, Andrés Bosch...

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